La posesión de Diego Torres, el nuevo alcalde de Itagüí, estuvo llena de simbolismo y emotividad.
Ante cerca de 3 mil personas en la mañana del pasado viernes 29 de diciembre Diego Torres fue erigido como nuevo alcalde de la ciudad para el periodo 2024-2027.
La posesión comenzó con una eucaristía en la iglesia Nuestra Señora del Rosario de Itagüí, que fue concelebrada con sacerdotes de las distintas parroquias de la ciudad y el presbítero Luis Alberto Angel Álvarez en representación de monseñor Ricardo Tobón.
Torres vistió con orgullo el uniforme de gala de los Bomberos Voluntarios de Itagüí, organización de la que es parte en grado de teniente y que marcó su vocación de servicio a lo largo de todos estos años, según expresó en sus palabras.
La Defensa Civil , la Cruz Roja, Policía, Ejército, Agentes de Tránsito, patrulleritos y vigías ambientales hicieron presencia en el lugar dando la bienvenida al nuevo alcalde y enviando un mensaje contundente de respaldo a la institucionalidad.
Justo antes de empezar el que sería quizás uno de los discursos más importantes de su vida, se escuchó en todo el parque la voz apacible de una mujer, era Pilar, la esposa del nuevo alcalde desde la clínica en donde pocas horas después dio a luz a Pedro, el primer hijo de la pareja: “Mi amor, aquí estamos Pedro y yo esperándote, te deseo lo mejor, acompañándote desde acá desde la clínica. Estamos súper orgullosos de ti, te amamos.”
Al momento se vieron cientos de pañuelos limpiar los rostros emocionados de quienes estaban en el acto, en un momento en que el
protocolo, perfectamente ordenado y elegante, dio espacio a la emotividad .
Y tal como el mismo alcalde anunció, pedro nació ayer, 29 de diciembre, en las horas de la noche, siendo recibido con la promesa pública de su padre: trabajar para hacer de Itagüí una ciudad cada vez mejor, donde Pedro, todos los demás niños itagüiseños y visitantes puedan crecer felices y seguros.
